BEYOND THE LOBBY - MARGAUX
Margaux Hemingway en La Habana: Un reencuentro con las huellas de su abuelo
Por Jon @whereismyhotel
En aquel febrero de 1978, la renombrada actriz y modelo Margaux Hemingway se embarcó hacia La Habana, buscando reencontrarse con el legado de su abuelo, el famoso novelista Ernest Hemingway. En compañía del fotógrafo David Hume Kennerly, exploró los sitios más emblemáticos de la vida del autor en Cuba, ahondando en la estrecha relación que existió entre el escritor y la isla caribeña.
Su primera escala fue la Finca Vigía, la residencia donde Hemingway dio vida a obras maestras como El viejo y el mar. Margaux deambuló entre los libros, efectos personales y estancias iluminadas por la luz tropical, conectando con la esencia creativa que aún impregna el ambiente. Actualmente, la finca opera como un museo, preservada tal como la dejó el escritor.
Margaux se adentró en la animada y evocadora Habana. Visitó El Floridita, el bar predilecto de Hemingway, donde posó junto a la célebre escultura de bronce del autor, rodeada de turistas y camareros. Allí, entre daiquiris y paredes color de rosa, continúa el espíritu bohemio de antaño. También se dejó caer por el mítico Club Tropicana, centro neurálgico de la vida nocturna habanera, donde se sintió parte de un pasado lleno de glamour.
Otro enclave rebosante de historia fue el Hotel Ambos Mundos. Desde la habitación 511, Hemingway escribió incontables relatos. El hotel mantiene ese espacio como un santuario literario en el corazón mismo de La Habana Vieja. En otros sitios como la Fábrica de Arte Cubano y el Hotel Nacional, se sintió arropada por la historia.
Mientras paseaba por el Vedado, Margaux se topó con una ciudad vibrante de arte y vitalidad. Cubanito Ibiza se reencuentra también con la esencia Cubana, desde la arquitectura, clubes nocturnos, hasta cafés repletos de música. Una Habana creativa digna heredera del espíritu que tanto hechizó a su abuelo.